¿Tener un mal día puede ser positivo?

¡Correcto!, tener un mal día puede ser positivo. ¿El secreto?, escuchar nuestras emociones.

¿Cuántas emociones conoces?

Se han identificado 6 emociones universales (aunque hay más que salen de las principales):
  • Asco

  • Produce rechazo a algo que tenemos delante, por ejemplo, evita que nos intoxiquemos por la comida en mal estado.

  • Miedo

  • Nos protegemos de aquello que es peligroso.

  • Sorpresa

  • Promueve la orientación y adaptación a la novedad.

  • Alegría

  • Provoca la búsqueda de lo placentero y a repetir aquello agradable.

  • Enfado

  • Nos induce a defendernos y a protegernos.

  • Tristeza

  • Nos ayuda a superar dificultades y a pedir ayuda.

¿Hay emociones positivas o negativas?, ¿Hay emociones que son buenas o malas?

La respuesta es no, quizás podríamos etiquetarlas como agradables o desagradables.

Todas las emociones son válidas y necesarias, las emociones como la tristeza, el enfado, el asco, el miedo… Son igual de importantes que la alegría, por ejemplo.

Bien es cierto que, como seres humanos, buscamos o preferimos aquellas emociones que nos aportan bienestar y evitamos aquellas que no.

Es algo natural, pero debemos tener en cuenta que hay que aceptar cuando tenemos un mal día o cuando estamos tristes, enfadados, frustrados, etc.

En ciertas situaciones no es saludable intentar evitar las emociones desagradables, al intentar evitar evidenciamos el malestar y no podemos gestionar de la mejor manera la situación.

Todas las emociones son funcionales y válidas, ahora bien lo que importa es la conducta que surge de la emoción, el nivel de intensidad y la funcionalidad de la misma.

Es decir, depende cómo afecte a nuestro funcionamiento diario y si esa emoción nos ayuda a prosperar o por el contrario nos bloquea.

Es igual de malo estar extremadamente contento que extremadamente triste, por ejemplo, si estamos muy eufóricos podemos cometer “locuras” y poner en contra nuestra vida, salud o nuestra economía.

Ahora bien, ¿qué hago si tengo un mal día?

    • Aceptar que hay días en los que no estoy bien, “respirar” lo que siento sin juzgar.
    • Analizar que me intenta “decir” ese mal día, ¿hay algo en tu vida que no funciona?
    • ¿Hay algo que no sabes gestionar? ¿Qué necesitas?
    • Dedicarte al auto-cuidado.
    • No intentar evitar esa emoción con distracciones, ni invalidar lo que siento.
    • Habla con gente de confianza y que sientas apoyo y comprensión.
    • Recuerda que no es tan importante la emoción sino el comportamiento que conlleva,busca maneras óptimas de expresar la emoción.
    • No escondas lo que sientes. Si el mal día persiste y te genera un malestar intenso y que afecta a tu funcionalidad a nivel personal, social, laboral y/o pareja, desde el Centro de Psicología en Cerdanyola podemos ayudarte a gestionarlo mejor.
Patricia Soler

Colegiada nº 28119

CONTACTO

Pide información o cita

QUIENES SOMOS

Conoce nuestro equipo